miércoles, 28 de marzo de 2012

Historia de un minuto - cinco (parte 2)


¡Mi-mi-miércoles! Gente, de nuevo es miércoles y les traigo el “desenlace” de esta fabulosa historia. Bueno… “desenlace” porque la verdad no la considero terminada aun, ese se me hace un final muy tonto y se que puedo escribir algo mejor, espero que sea de su agrado y no los “saque de onda”. Cuídense, disfruten sus vacaciones de semana santa (si tienen, yo no :( porque soy bien teto) y nos leemos el próximo Miércoles :D

Aquí la parte 1 por si no al leyeron

PARTE UNO!!


Historia de un minuto – cinco(parte dos)

-¡Hey profe! Lea la poesía que seleccioné – le dijo a su profesora mientras de la bolsa de su pantalón sacaba un papel doblado en 4

- emm… ¿Tienes tiempo a la salida? Es que ahorita tengo clase, mira, a la salida te veo en el salón de usos múltiples, ahí puedes declamarme tu poesía y te doy mi opinión, ¿ok? – mientras guardaba tareas que revisaría esa noche.

Esa misma tarde, a la hora de la salida Eduardo tomo su mochila y sus cosas para salir disparado al salón de usos múltiples que era el lugar donde se reunía el club de lectura y redacción, esa misma tarde los mejores talentos naturales del equipo de futbol en el que jugaba, les haría daño la pizza de la cafetería imposibilitándoles jugar y dejando la oportunidad perfecta en la cual, Eduardo, hubiese podido demostrar todo ese talento que su entrenador nunca tuvo oportunidad de ver.

-¡Ya llegue! – grito animosamente Eduardo al entrar al salón en la cual la profesora se encontraba sentada en las sillas a modo de auditorio

- vas chamaco, súbete al pódium y sorpréndeme

- ¡Va profe! Está… ¡uf! – mientras de nuevo volvía a sacar aquella hoja de papel. Se preparo, apretó los puños, tomo una larga bocanada de aire y comenzó…

“Me gustas cuando callas porque estás como ausente,
y me oyes desde lejos, y mi voz no te toca.
Parece que los ojos se te hubieran volado
y parece que un beso te cerrara la boca.

Como todas las cosas están llenas de mi alma
emerges de las cosas, llena del alma mía.
Mariposa de sueño, te pareces a mi alma,
y te pareces a la palabra melancolía.

Me gustas cuando callas y estás como distante.
Y estás como quejándote, mariposa en arrullo.
Y me oyes desde lejos, y mi voz no te alcanza:
déjame que me calle con el silencio tuyo.

Déjame que te hable también con tu silencio
claro como una lámpara, simple como un anillo.
Eres como la noche, callada y constelada.
Tu silencio es de estrella, tan lejano y sencillo.

Me gustas cuando callas porque estás como ausente.
Distante y dolorosa como si hubieras muerto.
Una palabra entonces, una sonrisa bastan.
Y estoy alegre, alegre de que no sea cierto. “

Poema XV, Pablo Neruda

A cada verso era como si tuviera la oportunidad de volver las palabras en sentimientos y estas se volaran por todo el salón tocando todos y cada uno de sus rincones, como si fueran capaces de escarbar en el alma de las personas y sacar de la oscuridad esas sensaciones olvidadas. Al finalizar de recitar aquel poema, Eduardo estaba sin aire, con el papel arrugado entre sus puños que apretaban con fuerza y como si fuera a golpear al cielo en cualquier instante. La profesora solo se limito a levantarse con los ojos a punto de llorar y se limito a decirle

- perfecto… es lo mejor que he escuchado de ti, si la cabrona no cae con eso, la mato – añadió jugando

-¿Enserio? ¿Cree que funcione?

-tiene que, si lo haces con el mismo sentimiento…

Emocionado por aquella esperanza que le otorgo su profesora, Eduardo corrió hacia casa de Marcos. Marcos era un sujeto de uno o dos centímetros más alto que Eduardo, de nariz chata y boca delgada, piel clara, cabello negro y alborotado, ojos grandes y más corpulento que Eduardo. Marcos era amigo de Eduardo desde la primaria y estos últimos no habían conseguido cortar el cordón umbilical el uno con el otro a pesar que ambos entraron a universidades diferentes, estos aun se frecuentaban para hacer tarea juntos, platicar, comer, etc. Marcos era el amigo que tenia consejo, opinión y respuesta para todo y a Eduardo le resultaba increíble el modo de describir la realidad y ayudar a resolver los problemas de los demás pero las opiniones y consejos que el siempre daba nunca funcionaban en su propia vida. La respuesta que Marcos daba era siempre la misma “es que tengo una maldición pues…” que era la respuesta mas tonta que podía dar.

-¿entonces lo harás? – pregunto Marcos a Eduardo mientras se reincorporaba de aquel ataque en el que casi se arranca el pelo

-si wey, ya me decidí. Lo haré mañana – respondió Eduardo con aquella sonrisa picara

-“hombres necios…” eres un pendejo, te va a mandar muy lejos y luego no quiero que andes de marica

- lo bueno es que eres mi amigo, si no… imagínate… - respondió Eduardo riendo

- ¡cállate basura! Eres como mi hermano y eso de las bateadas no es cool… pero no entiendo wey, ¿Por qué Miss cafeína? O sea… yo se, esta bien buenota pero no mames, es todo eso que te dije antes y todavía quieres ir a estamparte con esa pinche pared, es… ¡ilógico! – sermoneo Marcos mientras buscaba en su mente una respuesta que no rebasara los limites de la locura para en ese momento a bofetear a su amigo

-wey, eso de que esta bien buenota y todo eso lo se, pero… wey, la conozco desde la secundaria y en la secundaria era un pan de Dios, incluso en la prepa aun hablábamos y cuando la encuentro de vez en cuando, me saluda y tenemos charlas cortas, digo, si fuera una persona tan mala como todos piensan que es, ni me saludaría

-wey, c’mon sabemos que si te habla bien es porque fuiste de las pocas personas que se porto “lindo” con ella en la secundaria, digo… todos le decían “vaquis”, ¿A quien le va a gustar que le digan así? Luego ya tiene novio, digo, si anda con el es por algo… pero bueno…

Marcos y Eduardo continuaron platicando y recordando tiempos de cuando iban en la secundaria y preparatoria hasta que llego la hora de que Eduardo regresara a su casa. Esa noche Eduardo tuvo sueños maravillosos de cómo seria su experiencia en realidad.

Al día siguiente Eduardo continúo con sus actividades diarias hasta que dieron las 5 de la tarde. Salió de su casa, se dirigió a un parque que se encontraba cerca del Oxxo en el que siempre encontraba y para su suerte no tuvo que esperar mucho para que Marié pasara.

-¡Mariana! –grito Eduardo desde una banquita en el parque mientras le hacia señas para que se dirigiera hacia donde el se encontraba.

Mariana se dirigió hacia donde se encontraba Eduardo con un par de tacones en las manos

-Eddie ¿Cómo estas? – antes de que pudiera continuar Eduardo le pidió que lo escuchara

- espera y escucha… - tomo aire de nuevo, apretó los puños y relajo los hombros y comenzó - Me gustas cuando callas porque estás como ausente, y me oyes desde lejos, y mi voz no te toca. Parece que los ojos se te hubieran volado y parece que un beso te cerrara la boca – antes de que pudiera continuar con el siguiente verso un peculiar sonido lo interrumpió

- ¡jajajajajajajajajajaja! ¿Me estas declamando poesía? Jajajajajajajajajajajajaja, ¡no mames, que teto estas! – continuo riéndose a carcajada suelta mientras Eduardo metía la mano en la bolsa del pantalón para apretar con todas sus fuerzas el papel donde tenia escrito la poesía que nunca pudo terminar de declamar en un intento por aliviar aquella extraña sensación. – jajajaja que tonto, ya me voy Eddie, jajaja – y Mariana se retiro riéndose, incluso cuando ya no era visible para Eduardo, el aun continuaba escuchando aquella carcajada. Enojado, Eduardo salió corriendo a su casa, tomo el balón de futbol y desquito su ira a cañonazos contra la pared de la casa de algún vecino.

Al día siguiente Eduardo salió de su casa para ir con Marcos a contarle su desgracia cuando un par de cuadras un auto le cerro el paso del cual bajaron un par de tipos que eran por lo menos 15 centímetros mas altos que el y 4 veces el ancho de su cuerpo, lo tomaron como si fuera una escoba y lo arrojaron dentro del automóvil. Dentro del automóvil Eduardo fue golpeado brutalmente, para el final de la golpiza, Eduardo tenia 2 costillas rotas, la nariz fracturada, un ojo completamente cerrado y la pierna derecha fracturada. Para finalizar su castigo de manera severa uno de sus captores se mostro, se trataba del novio de Mariana, este último como “regalo” le mostro un video en su celular de Mariana teniendo sexo oral con el.

-a ver si con poesía consigues mamadas tan buenas como esta –respondió en tono burlón mientras le obligaba a ver el video. Después lo aventaron un par de cuadras fuera de su casa donde Eduardo permaneció tirado una hora hasta que una vecina lo vio tirado por accidente y lo reconoció.

Eduardo permaneció perdió conciencia en el momento que lo aventaron como si se tratara de un costal de papas, para cuando volvió a recobrar conciencia se encontraba completamente adolorido en alguna clínica del seguro. Eduardo pensó que después de semejante acción que había realizado el novio de Mariana, esta última terminaría con el y quizá se disculparía, lo que el nunca supo fue que Marié ese mismo día paso todo el día riéndose con su novio de lo patético que le había parecido el hecho que le leyeran poesía y de lo patético que se veía todo golpeado ya que su novio al finalizar la paliza le había tomado un par de fotos. Esa misma noche Marié y su novio mantuvieron relaciones sexuales hasta que ambos cayeron rendidos.

Tiempo después, Eduardo pasó por una etapa de rehabilitación y negación de lo que había acontecido. Solo Marcos supo lo que en realidad pasó. La historia que todo el mundo se entero fue de que Eduardo fue asaltado, se rehusó y fue golpeado por lo mismo. Con respecto a su poesía, la historia “oficial” fue que a la hora de la hora se rajo y no le declamo nada.


ese es el "final", la verdad ese último parrafo no me gusto, pero igual pienso modificar ese final.

El cafe debe ser negro como el infierno, fuerte como la muerte y dulce como el amor.

Proverbio turco.


imagen

http://nyangirl.deviantart.com/

miércoles, 21 de marzo de 2012

Historia de un minuto - cinco (parte 1)


¡Miércoles de poesía! Y hoy… 21 de Marzo es el día mundial de la poesía e irónicamente hoy no les subiré poesía, chistoso, ¿no?

Hoy les traigo historia… y les traigo la cinco

¿Dónde esta la cuatro?

No me gusto y por eso no la posteare aun.

La historia de hoy… pues la quize adaptar al modo de hablar “coloquial” de muchas personas que conozco y por lo mismo tuve que sacrificar descripción para profundizar mas en el modo de hablar y que mas… esta… grosera (relativamente). Espero sea de su agrado y nos leemos el próximo miércoles, por cierto, no se olviden de darle “Like” a la página del facebook.

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Historia de un minuto – cinco

-wey, no mames, ¿enserio? –Dijo Marcos en voz alarmada

-¡si wey! Lo voy hacer –respondió Eduardo con voz de seguridad

-es que… ¡no mames bato! ¿Ya viste a quien le vas a decir tus locuras? O sea… ¡wey! ¡Es Miss cafeína! ¿Ya viste a su novio? ¡Tiene cuadros en los cuadros en los cuadros! ¡Y el tamaño de los músculos de sus brazos es como del grande de la panza de tu papá! O sea… es “Marié” –continuo Marcos mientras recorría el cuarto de punta a punta con su mano en cara y peinando su pelo con la mano hacia atrás de manera agitada –wey… soy tu amigo y todo el pedo pero… ¿enserio? ¡Wey! Para empezar es modelo… ¿Sabes que significa eso?

-amm… no, ilústrame por favor –respondió mientras en su rostro se dibujaba una sonrisa pícara

-ok, empecemos. ¿Cuánto mides? ¿1.70? ¿1.72?

-algo así, supongo

-y ella esta mas o menos de tu estatura, ¿no? –mientras Eduardo asentía con el rostro – bueno, entonces ya sabemos que están de la estatura… cosa que no seria tanto problema si ella no fuera modelo, ¿haz visto cuanto mide con tacones? ¡Wey, con los tacones que usa mide como uno ochenta y algo! Son como por lo menos diez centímetros de diferencia… ¿sabes lo que son diez centímetros de diferencia en la estatura de un hombre y una mujer?

-no y la verdad no me importa

-¡Cállate pendejo! El que esta hablando soy yo, déjame seguir. Luego… su novio… ¡wey! El tipo esta súper mamadisimo y mide como 1.90, esta en la selección de nacional de Americano. ¿Enserio quieres competir contra el? Y bueno… aparte que si eso no es suficiente, dinero… hablemos de dinero. ¿Haz visto cuanto gasta a la semana? ¡Gasta en un día lo que yo gano en una semana!

- ¿Y que? El que sea ostentosa no significa que no tenga sentimientos y probablemente si continua con su novio es porque todos son muy jotos para llegarle –respondió Eduardo con una seguridad tan grande, que se podría decir que sabia lo que decía

- ay no mames –musitó Marcos mientras se recostaba en la cama del cuarto y a punto de arrancarse el cabello con las manos.

Pero Marcos tenía razón en muchos de los argumentos que utilizó para describir a Mariana, “Marié”. Marié era la representación en persona de la transformación de la oruga “fea” en mariposa. Durante la secundaria, Marié era una niña chaparrita (en comparación con el promedio), un poco gorda que usaba brackets y lo mas rescatable era su rostro. Una niña de piel blanca como la leche, ojos color aceituna y boca chiquita, pelo castaño claro y siempre alborotado, y que mientras que a los catorce años la mayoría de las chicas de su salón ya tenían cadera, cintura y senos, esta última aun conservaba su cuerpo y rostro de niña y por lo tanto no captaba mucho la atención de los chicos. Esa fue la historia de Marié durante la secundaria, después de la secundaria nadie supo de ella hasta que entraron a la preparatoria. Marié de ser aquella escuincla “gorda, chaparra y desgreñada” como la solían describir algunos de sus compañeros, regreso siendo una “mariposa”. Marié había crecido al punto de alcanzar el metro setenta con facilidad y que al final de su madurez terminaría en un orgulloso metro setenta y cinco; sus ojos habían crecido y el color aceituna se había aclarado, sus pestañas enormes y naturales realzaban la belleza de aquel verde; su pelo castaño se aclaro revelando un tono que al estar en oscuridad era un rojizo como el cobre y a la luz del sol un castaño tan claro como el de las hojas en otoño y ese lacio alborotado alcanzó el respeto del sol, el viento y todos esos elementos que odian las mujeres con respecto a su pelo, este último no importaba la situación, siempre se veía “perfecto” como lo describían sus amigas; su cuerpo había alcanzado las dimensiones de lo que le llamarían la mujer perfecta, los brackets habían desaparecido dándole la sonrisa perfecta acompañada de una boca pequeña pero con unos labios enormes y rosas que siempre daban esa ilusión de “lip gloss” que rara vez llegó a usar. Y su piel blanca como la leche consiguió un bronceado perfecto y sus mejillas consiguieron un rubor que le añadió el toque de inocencia que con todo ese desarrollo físico se había perdido. Se había convertido en algo que mientras la mayoría de las mujeres recibían piropos como “buenota” y cosas por el estilo, ella los únicos piropos que recibía era “hermosa”, “linda”, “bonita” y “perfecta”.

Durante la preparatoria, en un evento de uno de sus familiares conoció al que era su actual agente, este último la sumergió al mundo del modelaje en donde adquirió la actitud del glamour y su “cabroneria”, consiguió conocimientos entre sus compañeras de modelaje que la tomaron de la mano y la llevaron por la senda de lo que vulgarmente se llamarían defectos. Materialista, superficial, egocéntrica y tonta pero en buena parte ella aprendió a jugar con todos esos “defectos”. Parecía increíble que le llamaran “tonta” porque sus calificaciones eran superiores a la de la gran mayoría estando 1 o 2 lugares por debajo de la calificación mas alta y su conversación, a pesar que la mayoría del tiempo solamente sonreía y se mantenía callada (como se le enseño en el modelaje) cuando abría la boca, su opinión tenia mucho mas sentido que la de mujeres y hombres de mayor edad. Después en algún punto de su vida, los “defectos” adquiridos se vieron aumentados exponencialmente cuando un año antes de terminar la preparatoria “mágicamente” apareció con su novio que era el quarterback de la selección estatal y futuramente formaría parte de las líneas de la selección nacional. En su vestimenta paso de la humildad al lujo mostrando marcas cuyos precios eran ridículamente altos pero que socialmente eran las más aceptadas. Nadie la culpó, su “perfección” y su desempeño como modelo le habían abierto tantas puertas que para la edad que tenía, poseía más dinero del que pudiera necesitar. Marié con el paso del tiempo fue instruida en el arte del engaño, mentira, chantaje y capricho, siendo este último su especialidad.

Eduardo por el contrario, era un compañero que había asistido a la misma secundaria, preparatoria que ella y que tenia la “fortuna” de vivir cerca de su casa y encontrarla casualmente cuando iba al Oxxo a realizar una compra cualquiera. Eduardo era un sujeto de nariz chica, ojos grandes y “trompudo”, de piel morena y de complexión muy delgada; este alcanzó el metro setenta y dos y al final de su madurez nunca rebasaría el metro ochenta, su pasión era el jugar futbol y que de haber nacido un par de años adelante o atrás, hubiese sido el mejor de su equipo, pero este no era su caso, Eduardo nunca podría contra el talento natural del equipo en el que jugaba, “mediocre” fueron las palabras que utilizó el entrenador para describirlo. Eduardo había sido arrastrado al club de literatura y redacción en contra de su voluntad en un esfuerzo por su profesora para mejorar su ortografía y porque esta última vio “algo” en el. Desde entonces Eduardo desarrollo un gusto por la lectura por la falsa idea que había implantado su profesora en el, “enamora mas un hombre con buena ortografía que uno que no” y claro, de la mano de la literatura había encontrado el romanticismo de múltiples autores. Después de un par de semestres en este club, Eduardo se había convertido en un excelente orador y un declamador “exquisito” como lo describía la profesora, “es una pena que Eddie tenga un gusto tan arraigado por ese deporte barbárico que por la lectura, seria un excelente escritor” eran las palabras que utilizaba muy a menudo su instructora y que desde un tiempo se había convertido en su amiga y cómplice para su acto de amor mas grande en toda su vida después de haber escuchado la historia de su instructora que en su juventud un chico la había conquistado al recitarle un poema. Eduardo inspirado por aquella maravillosa historia decidió que realizaría un acto similar y quizá así conseguiría conquistar a “Miss cafeína”.

Parte dos el próximo miércoles! :)

Día mundial de la poesía♥